Han pasado nada más y nada menos que 26 años desde la última entrega de la franquicia que apostaba por un componente en 3D, siendo Donkey Kong 64 el primero y el único, hasta ahora, que nos ha dejado con una propuesta así. Por todo ello, me quedé con la boca abierta cuando vi que era Donkey Kong el que iba a acaparar gran parte del protagonismo de la presentación y el que está dispuesto a dejarnos con un título imprescindible.
No tengo ninguna duda sobre ello debido a que en las últimas horas, en el mismo evento que he podido probar la Nintendo Switch 2, he tenido ocasión de jugar durante un buen rato a esta aventura tan rematadamente simpática, colorida, divertida y con la que tiene toda la pinta de que las horas se pasarán volando cuando nos pongamos a los mandos con su versión final.